PEACE

PEACE
Paz y Ciencia

sábado, 2 de febrero de 2013

El Silencio Habla: El Poder del Ahora


EL SILENCIO HABLA

El reino de la conciencia es mucho más vasto de lo que el pensamiento puede entender. Cuando dejas de creerte todo lo que piensas, sales del pensamiento y ves con claridad que el pensador no es quien tú eres.

La mente existe en un estado de "nunca tener suficiente", por lo que siempre ambiciona más. Cuando te identificas con la mente, te aburres y te inquietas fácilmente. El aburrimiento significa que la mente tiene hambre de nuevos estímulos, de más alimento para el pensamiento, y que su hambre no está siendo satisfecha.

Cuando estás aburrido, puedes satisfacer el "hambre mental" leyendo una revista, haciendo una llamada telefónica, poniendo la tele, navegando en Internet, yéndote de compras o -y esto es bastante común- transfiriendo al cuerpo la sensación mental de carencia y la necesidad de querer siempre algo más, y satisfaciéndolas brevemente ingiriendo más comida.

O puedes sentirte aburrido e inquieto, y observar la sensación de estar aburrido e inquieto. A medida que vayas dándote cuenta de estas sensaciones, empezará a surgir algún espacio y quietud en torno a ellas. Al principio solo hablrá un poco, pero, conforme crezca la sensación de espacio interno, el aburrimiento empezará a disminuir en intensidad y significado. De modo que incluso el aburrimiento te puede enseñar quién eres y quién no eres.

Descubres que ser "una persona aburrida" no es tu identidad esencial. El aburrimiento, simplemente, es un movimiento interno de la energía condicionada. Tampoco eres una persona enfadada, triste o temerosa. El aburrimiento, el enfado, la tristeza o el miedo no son "tuyos", no son personales. Son estados de la mente humana. Vienen y van.

Nada de lo que va y viene eres tú.

"Estoy aburrido": ¿quién sabe esto?

"Estoy enfadado, triste, atemorizado"; ¿quién lo sabe?

Tú eres el conocimiento, no el estado conocido.

Los prejuicios de todo tipo implican que te sientas identificado con la mente pensante. Significan que ya no ves al otro ser humano, sino únicamente tu propio concepto de ese ser humano. Reducir la riqueza de vida de otro ser humano a un concepto es, en sí mismo, una forma de violencia.

El pensamiento que no está enraizado en la autoconciencia se sirve a sí mismo y es disfuncional. El ingenio exento de sabiduría es extremadamente peligroso y destructivo. Constituye el estado habitual de la mayor parte de la humanidad. La expansión del pensamiento por vías científicas y tecnológicas, aunque no es instrínsecamente bueno ni malo, también se ha vuelto destructivo, porque muy a menudo el proceso mental del que surge no hunde sus raíces en la conciencia.

El paso siguiente en la evolución humana es trascender el pensamiento. Actualmente es nuestra tarea más urgente. Esto no implica dejar de pensar, sino dejar de identificarse completamente con el pensamiento, dejar de estar poseídos por el pensamiento.

Siente la energía de tu cuerpo interno. El ruido mental se serena y cesa inmediatamente. Siéntela en tus manos, en tus pies, en tu abdomen, en tu pecho. Siente la vida que eres, la vida que anima el cuerpo.

Entonces el cuerpo se convierte en una puerta, por así decirlo, hacia una sensación de vida más profunda que subyace a las fluctuaciones emocionales y al pensamiento..

Hay una riqueza de vida en ti que puedes sentir con todo tu Ser, no solo con la cabeza. En esa presencia en la que no necesitas pensar, cada célula está viva. Sin embargo, en ese estado, el pensamiento puede activarse si se le necesita para alguna finalidad práctica. La mente puede seguir operando, y opera perfectamente cuando la inteligencia mayor que eres la usa y se expresa a través de ella.

Eckhart Tolle: "El Silencio Habla"

No hay comentarios: